Había ganas de cante entre la afición; de cante, no de politonos ni de frases hechas; de cante bueno, –güeno, en argot– de ése que llega al corazón y fluye por las arterias y suena con el compás infinito de las sístoles y diástoles, anacrónico y diacrónico, que se rebosa como un botafumeiro o como una olla de pisto o caparrones, de potaje o de papas a lo ciclista, que son las que le privan a José cuando está en su Sevilla. Había ganas y por eso a la concurrencia, que estaba más receptiva que nunca, se le hizo corta la hora que se tomaron José de la Tomasa y Manolo Franco para exponer sus virtudes con la exuberante claridad que les define, con el delicioso viaje por los ecos de la Andalucía cantaora, por la pasión que dibuja el flamenco dicho sin ambages, sujeto a la inspiración y el conocimiento, a un intervalo de agradecida cordura que hace que las cuerdas vocales se tensen en un minúsculo y complejísimo juego de albahaca y saliva, de respiraciones, de alientos programados para que el cante entre a compás, milimétrico y absolutamente nuevo en cada tercio, como en la soleá telúrica y hondamente espesa en la que José de la Tomasa sacó fuera de sí el potencial cantaor que sostiene como en una arquitectura metafísica cada una de sus neuronas, cada poro de su piel. Y a su izquierda Manolo Franco, que rítmicamente acompasó cada melodía y cada falseta con una sublime maestría, con una singular belleza que cautivó desde la malagueña y que encontró en los tientos-tangos una de esas cumbres flamencas que valen por sí mismas todo un concierto. También disfrutamos por tarantos y la granaína breve que dio paso a las bulerías con las que remató un bellísimo concierto que tuvo hermosos momentos, algo de garganta rozá y el insondable algoritmo de la guitarra de ese maestro llamado Manolo Franco, que el jueves entusiasmó.
o XII Jueves Flamencos del Salón de Columnas del Teatro Bretón de Logroño. Primer concierto
(localidades agotadas) Cante: José de la Tomasa. Toque: Manolo Franco. 17 de enero de 2008. Artículo publicado hoy en Diario La Rioja.