martes, 15 de mayo de 2007

Pepe Moral quiere ser alguien

Usted y yo somos alguien, a pesar de algunos somos alguien. Pero en los toros ser alguien es otra cosa, es que le llamen a uno los empresarios y no darle la gana a uno coger el teléfono, es poderse coger vacaciones en noviembre y dormir espatarrao hasta la hora de la siesta. Ser alguien en los toros es tener la agenda repleta, partidarios en las recepciones de los hoteles y muchos pesaos en el entorno. Hay novilleros y matadores (y algún que otro periodista) que creen ser alguien y andan más solos que la una; hay matadores que matarían por ser alguien pero que en el fondo carecen de valor para serlo y hay otros, como Pepe Moral, sin ir más lejos, que desean por encima de todo en la vida ser alguien en la tauromaquia, que le atosiguen los partidarios, tomarse vacaciones en invierno, no coger el teléfono a los empresarios y dormir a pierna suelta hasta la hora de la siesta. Que lo consiga es otra cosa, porque ya se sabe que en el toreo para lograr la ansiada meta del triunfo y reconocimiento han de concurrir un sinfín de circunstancias. Pepe Moral es un novillero sevillano, que se ha hecho en el norte y que tiene un apoderado de La Rioja (Pepe Amilburu) que salió ayer a Las Ventas con ansias de victoria, con afán de triunfo real y aunque su tauromaquia ha de ser pulida por el poso del tiempo, la verdad es que tiene la virtud de quedarse muy quieto y disfruta al máximo entrelazando los muletazos si reparar en contemplaciones. Se fue a porta gayola, dio sitio a los novillos, puso la muleta siempre por delante y aunque mata mal, ataca a los toros en rectitud. No sé las razones, pero me parece como un potro joven, como un diamante en bruto al que falta cincelarlo para obtener metas mayores. Me da igual si las orejas fueron generosas o no, la sensación que dejó en la plaza fue la de un novillero con ansias de ser alguien, y eso, en estos tiempos, es una bendición. Pero ojo, conviene detenerse en la forma en la que interpreta el toreo al natural y hasta el sitio que lleva a los astados. Por cierto, me encantó la novillada de Guadaira, que a pesar de su mansedumbre sacó casta –y digo casta, que no raza– y algunos mucha boyantía, además de pitones buidos y astifinos.
(Preciosa foto de Juan Pelegrín, de la web de Las Ventas)


o Corrida de hoy: Toros de Núñez del Cuvillo (que dios nos pille confesados) para Morante de la Puebla, Curro Díaz (que sustituye a Alejandro Talavante) y El Capea.

gracias por visitar toroprensa.com

Blog de ideas de Pablo G. Mancha. (Copyleft) –año 2005/06/07/08–

Queda permitida la reproducción, distribución, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta bitácora, en cualquier forma o modalidad (Siempre y cuando se cite al autor)